Impuesto de Sucesiones

Adiós al impuesto de sucesiones: las comunidades autónomas que se van a librar de pagarlo

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Blanca Espada

Durante muchos años, recibir una herencia en España podía convertirse en una carga en lugar de una ayuda. Lo que en principio debía ser un alivio económico o un gesto familiar cargado de significado, terminaba a menudo con la amarga sorpresa de tener que pagar el impuesto de sucesiones y que, en algunos casos, superaba el valor de lo heredado. Esta situación provocó miles de renuncias a herencias, especialmente entre familias con menos recursos, que no podían asumir el coste fiscal de heredar lo que legítimamente les correspondía.

Afortunadamente, este panorama ha empezado a cambiar. Las comunidades autónomas, que son las encargadas de gestionar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, han ido tomando medidas para reducirlo o incluso eliminarlo casi por completo. La mayoría ha apostado por bonificaciones que llegan hasta el 99% o el 100%, especialmente cuando se trata de herencias entre familiares directos. Esta tendencia responde, en gran parte, a una demanda social cada vez más generalizada: heredar no debería ser un castigo fiscal. Y a pesar de que sigue habiendo diferencias notables entre territorios, el mapa fiscal español se está tiñendo poco a poco de medidas que alivian el bolsillo de los herederos. Andalucía, Madrid, Galicia o Murcia son sólo algunos ejemplos de comunidades que han decidido suprimir prácticamente este impuesto. En otras, como Cataluña o Navarra, se mantiene, pero con reducciones específicas. A continuación, repasamos cómo queda la situación en cada comunidad y qué regiones ya se han despedido, o están a punto de hacerlo, del temido impuesto de sucesiones.

Comunidades autónomas que han eliminado el impuesto de sucesiones

Algunas comunidades autónomas han tomado la delantera sobre el impuesto de sucesiones y ya aplican bonificaciones tan altas que, en la práctica, el impuesto ha dejado de existir. Es el caso de Andalucía, donde existe una reducción de hasta un millón de euros para cónyuges, descendientes y ascendientes. En Madrid, el tributo se reduce en un 99% para los mismos grupos familiares, lo que convierte a esta comunidad en una de las más favorables para recibir herencias.

Murcia ha seguido el mismo camino, también con una bonificación del 99% para cónyuges, ascendientes y descendientes. Lo mismo ocurre en La Rioja, donde, aunque se exige que la base a liquidar supere los 400.000 euros, la bonificación también alcanza el 99% para familiares directos. Por su parte, Castilla y León ofrece una reducción del 99% para cónyuges, hijos y padres.

La Comunidad Valenciana, que hasta hace poco era una de las más exigentes con este impuesto, ha optado también por aplicar una reducción del 99% para las herencias entre familiares directos. En Extremadura, los descendientes menores de 21 años disfrutan de esta misma bonificación, lo que supone un gran alivio para muchas familias jóvenes.

Regiones con exenciones parciales pero importantes

Otras comunidades no han eliminado del todo el impuesto, pero ofrecen condiciones muy favorables. En Galicia, por ejemplo, los herederos directos están exentos de pagar hasta un millón de euros, y por encima de esa cifra se aplican bonificaciones. En el País Vasco, si la herencia no supera los 400.000 euros, los herederos directos están exentos; si se supera, el impuesto es de sólo el 1,5%.

Cantabria ofrece bonificaciones de entre el 90% y el 99% para cónyuges, ascendientes y descendientes, y del 25% para otros familiares. En Castilla-La Mancha, las herencias entre cónyuges, ascendientes y descendientes disfrutan de una bonificación total si el importe no supera los 300.000 euros; si es mayor, se aplica una reducción del 80%.

En Aragón, la bonificación alcanza el 100%, pero únicamente si la herencia no supera los 500.000 euros. Y en Navarra, no se tributa por herencias de hasta 250.000 euros, y a partir de ahí los tipos son moderados: del 0,8% para importes pequeños, y entre el 2% y el 6% en el caso de herencias directas por consanguinidad.

Las islas también dicen adiós al tributo

Tanto Canarias como Baleares han tomado decisiones similares para reducir o eliminar este impuesto. En Canarias, la bonificación es del 99% para descendientes, cónyuges y otros familiares. Baleares ha sido aún más tajante: desde 2023, las herencias entre ascendientes, cónyuges y descendientes no tributan nada, al aplicarse una bonificación del 100%. Para hermanos, tíos y sobrinos, el descuento es del 25%, y si no hay descendientes, la bonificación puede subir hasta el 50%.

Cataluña y Asturias siguen aplicando el impuesto

Aunque también han introducido bonificaciones, Cataluña y Asturias mantienen criterios más estrictos que el resto. En el caso catalán, los descendientes menores de 21 años pueden heredar hasta 100.000 euros sin tributar, aunque con un límite de 12.000 euros anuales hasta alcanzar la mayoría de edad. Para cónyuges, el límite también es de 100.000 euros, y se aplican bonificaciones según el grado de parentesco.

Asturias, por su parte, exime del pago a los menores de 21 años, y a los cónyuges, ascendientes o adoptantes mayores, siempre que la herencia no supere los 300.000 euros. Aun así, muchos consideran que la comunidad debería avanzar hacia bonificaciones más amplias, en línea con la tendencia nacional.

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